DHP Investiga

En el mundo de hoy, es sabido que la corrupción ha llegado hasta los estratos más reconditos de la sociedad. Es por eso que en el día de hoy mostraremos una investigación exclusiva que realizó el equipo de producción de Dos Hombres Promedio: La Mafia de los Paseadores.
La gran mayoría de los argentinos posee perros, y un gran porcentaje de esta mayoría contrata al que se cree un inocente paseador que nos libere mientras estamos trabajando o haciendo algunos quehaceres. Pero, ¿Realmente sabemos a dónde los llevan los paseadores?, ¿Qué hay de cierto en las versiones que cuentan de viajes a la triple frontera y prostitución de cachorras?, ¿Es verdad que si tengo cinco manzanas y le doy dos a Juancito, me quedan tres manzanas?. Todos estos interrogantes y muchos más encontrarán su respuesta en una nueva edición de: DHP Investiga

9 de la mañana. Llueve sobre San Martín. El barro dificulta el andar de nuestra camioneta, mientras llegamos al lugar pactado para la entrevista. Un alrededor de casas precarias (algunas de chapa, otras prefabricadas) nos indica que estamos cerca.Al llegar, un par de ladridos nos da la bienvenida y otro más nos presenta a nuestro próximo entrevistado.Bobby tiene doce años. La mirada cansada y un gesto de experiencia marcado en el entrecejo, dejan ver el paso de los años de este Beagle, que a esta altura de su vida, ladra con prudencia, pero con seguridad.

-¿Cuándo fue la primera vez que te pasearon?
-En realidad, eso fue un invento de la prensa. Hay muchos perros que ladran giladas por el barrio. Yo me crié acá, en la calle y es obvio que nunca tuve recursos como para tener paseador. Lo que pasa, es que yo hace mucho tiempo que piso fuerte por acá. Entonces, los cachorros que buscan tener su propio nombre, a veces inventan historias que a mí, personalmente me dan risa. Si tuviera labios, me reíria de todas estas acusaciones absurdas…

Bobby no es su nombre real. Antes de encontrarnos por primera vez, quedó pactado que por seguridad y por las declaraciones que esta nota incluiría, lo mejor iba a ser buscar un nombre falso.Le ofrezco un poco de Dogui mientras cebo mate para mí y para la producción, a lo que accede gustoso y con gesto agradecido. Mueve la cola, ladra, nos hace fiesta.

-¿En donde estabas la vez que se destapó el asunto de la mafia de los paseadores de perros?
-Me acuerdo patente de ese día. Yo andaba buscando un bar que no tuviera puertas para poder ver la final del Nacional que jugaron Chacarita y Quilmes hace un par de años. Y de paso si podía, la jugaba de pobre perro, para que me tiraran un cacho de pizza ¿Viste?. Los hinchas que se juntan en los bares son muy descuidados, en cuanto festejan, tiran todo al diablo, y ahí yo aprovecho. La cuestión es que terminó el partido, y durante el informativo apareció la noticia. Yo me la veía venir, ¿Qué queres que te diga? Para mí era cantado…

-Perros mula, entregas de cargamentos a domicilio, pasos ilegales por la triple frontera. ¿Esperabas tanto?
-(Se lame la ingle, como distraído. Se detiene. Come un poco de Dogui. Piensa) La verdad es que sí. Uno siempre la juega de callado, pero las cosas se saben. El barrio es como un pueblito más chico y uno sabe en que andan los demás.Yo con los del baldío de acá a tres cuadras, tengo trato prácticamente desde que nací. Hemos revuelto bolsas de basura, corrido gatos, mordido viejas, desde que tengo uso de razón. Y uno ve para que lado perfila cada perro. No es una cuestión de raza. Vos podés ser un Golden con pinta de no joder a nadie y ser el peor perro del mundo…La gente compra siempre la imagen y se equivoca.

Bobby, ademas de ser un hermoso Beagle, es uno de los arrepentidos del caso de los paseadores. El 14 de marzo de 2000, se presentó voluntariamente en la oficina del juez De la Peña, a declarar lo que había ocurrido exactamente tres años antes, cuando era un cachorro y que aún hoy ronda en su memoria..

-¿Qué pasó el 14 de marzo de 1996?
-Ehh…,¿para vos 2000 menos 3 es 1996?

-Ok, ¿Y el 14 de marzo de 1997?
- (Resopla). Es duro, viejo, muy duro. Me acuerdo que había salido con el paseador y de golpe me encuentro que nos estaba atando en la puerta de un PH de Mataderos. Pero este pibe no era muy vivo, porque nos ató así nomás y se metió pa’ dentro. Entonces me empezé a soltar y cuando lo logré me mande adentro del PH yo también a ver que onda. Y cuando entré no lo podía….creer…(solloza)…

-Te damos un momento para que te recuperes..
- G..Gracias.. (Resopla de nuevo). Ahh, había de todo: estereos, celulares y también estaban mis colegas que hacían los trabajos sucios, con remeritas llenas de bolsillos donde colocaban las cosas y cruzaban la frontera. Pero, viejo, en el fondo estaba lo peor: las chicas.

-¿Las chicas?
- Sí hermano, había una cantidad de cachorras ahí terribles. Y de todas las razas: Terrier, Chihuahua, Doberman, de todo viejo. Y apenas tenían unos meses, todo por un par de huesos sin carne y algo de polenta. Es muy duro ver como la juventud se pierde así

-¿Eso te llevo a arrepentirte?
-Yo no soy ningún arrepentido porque no estaba metido en nada. Ese es otro invento de ustedes: los periodistas que buscan fama a costa mía. Se me cuelgan de la cola. Pero si declaré fue por esos pobres pibes: no podemos permitir que nuestra juventud se deteriore de esa manera, es incanino. Terrible

-¿Sentiste miedo por tu vida en algún momento?
-Y la verdad es que nunca quise ser perro policía, pero me apretaron y tuve que ladrar. Entonces, los perros a los que venían buscando, me empezaron a amenazar también. A mí me da lástima por los cachorros ¿Viste? A los más grandes, es jodido que los vayas a cambiar. Ya tienen sus propias mañas, y si los engancharon en la pesada, es porque de ahí no vuelven más. Pero a mi ver a un cachorrito haciendo de mula, por un hueso de costilla, me parte el corazón…

-¿Qué es lo que le pedís a la vida?
-Justicia. No pido más que eso. Yo no tengo cachorros, pero tengo amigos que sí y los veo sufrir todos los días. Todavía no tuvimos que lamentar ninguna desgracia, pero si las cosas siguen así, es muy probable de que terminemos siendo titular de Crónica en poco tiempo.Hay mucho pesado desbandado y desesperado por no caer. Acá cayeron a vivir perros policía retirados del departamento de narcóticos, que nunca se recuperaron de su adicción a las drogas…Si esos canes, son los que andan metidos en estas cosas ¿Qué tranquilidad nos queda a los que vamos a pedir pan a la panadería, o un churrasquito a la carnicería todos los días? Somos un grupo de perros decentes que tienen miedo. Y como te decía antes, no es una cuestión de raza. Porque yo soy Beagle puro, pero lucho junto a otros perros por la misma causa, de igual a igual.
No es cuestión de que se castigue porque sí a un Pitbull o a un Rottweiller por el prejuicio de asesino con el que cargan, o que se sacrifique a un perro cruza porque "Total, ¿Quién lo va a reclamar?". Lo único que pedimos es tranquilidad para nuestras jaurías, nada más…

Bobby se come lo último que queda en el plato y se sube a mi falda cuando huele el postre. Un suculento bife de chorizo, recién sacado de la carnicería. Le agradezco. Me ladra. Nos despedimos y volvemos a las oficinas de nuestra producción.Tal vez sirva de algo conocer que piensa un perro que sabe. Tal vez ayude, a que de una vez por todas las cosas cambien.

Que así sea.

Hablando con propiedad

En el año 1985, un estudio realizado por el Doctor Julius Erwing de la Universidad de Winsconsin, comprobó que las sociedades hispano-parlantes tienen aproximadamente una extensa gama de formas de expresar sus sentimientos frente a una misma situación mediante el vocabulario, conforme al estrato social al que pertencecen.
Para ejemplificar este estudio del docto, hemos decidido tomar desde el informe final, dos situaciones similares que presenció el Dr Erwing, en dos estratos sociales prácticamente antagónicos: la familia del Marqués Federico de Alvear entre Ayacucho y Azcuenaga, y la familia de Roberto "Tito" Gutiérrez.

Familia: Alvear entre Ayacucho y Azcuenaga Situación: Almuerzo dominical

Marqués: -Oh dulce Carola, Que bello día hemos elegido para degustar esta exquisita carne...
Carola: -Efectivamente mi Marqués. He comido hasta no dar más. Ahora me gustaría retirarme a mis aposentos para descansar algunas horas.
Marqués: -No, mi amada. Recuerda que debíamos ir al campo de los Rodriguez Peña y Callao, ya que tenían intención de mostrarnos las nuevas yeguas que adquirieron para su equipo de polo "La Gonnorrea". Además disputaran un encuentro amistoso contra el equipo de los Juncal y Esmeralda.
Carola: -Oh, ¡Cielos! ¡Lo olvidé por completo! Deberás excusarme querido mío, pero necesito descansar. La Gala de Palacio espera por nosotros esta noche, y prometí a papá estar espléndida. Ya sabes como es el Rey.
Marqués: -Lo se Carola, pero debo insistir. No verían con buenos ojos tu ausencia.
Carola: -Lo siento Marqués, es mi última palabra.
Marqués: -De acuerdo querida, todo sea para que esta noche estés despampanante.

Ahora, pasaremos al otro ejemplo que nos muestra el Doctor Erwing en su informe final.

Familia Gutierrez Situación: Almuerzo Dominical

Tito: -Ahh, Gladi. Mira el solazo que hay. Hoy si que es un día peronista ¿Eh?
Gladys: -Es verdad negro. Alto asado te mandaste. En cuanto agarre el baño pinto todos los azulejos. Pero primero me via a echa un torro.
Tito: -¡Que torro ni torro! Ahora no´ vamo' a Vitoria que juega El Matador contra lo puto de Tense. Hoy corren todo los hijo de puta.
Gladys: -Ni en pedo, gato. Me via dormi que a la noche pinta el Reventón de Once. Me via ve a Lo Gorrero.
Tito: -Ma ¿Qué Gorrero?. Si no veni a ve al Matadó se pudre el racho loca ¿Ah?
Gladys: -Recatate gato, no la agite´porque te via caga a corchazo. Va va, toca de acá y dejame dormi un rato.
Tito: -Andá gorda tumbera, metete los gorreros en el orto.

El resultado de este magnifico estudio habla por si sólo: la variación de vocabularios nos permite identificar el estrato social en el cual viven las diversas familias
En cuanto al Doctor Erwing, nunca más se lo volvió a ver. Dicen las lenguas populares que murió a manos de un simpatizante de Tigre, con el cual debatía el correcto uso del dequeísmo en las canciones de cancha.

Hasta aquí llegamos amigos. Nos veremos en la próxima emisión. Sean felices y hablen con propiedad.

Es decir: antes de hablar, piensen si tienen un piso en Recoleta o en Barrio Norte, o un BM a su nombre. Sino, chito la boca ¿Eh?

Medias Tintas

El hombre promedio alcanza los 70 años de vida. Su familia se compone de padre, madre, un hermano y/o hermana. Durante su existencia, conseguirá un trabajo promedio, se alimentará en base a una dieta promedio, sustentada por un salario promedio. Con algo de suerte, conseguirá una pareja promedio, se casará por iglesia (como lo hace el promedio de la gente), para formar su propia familia promedio.

No encontraremos en su currículum logros que nos avergüencen de tan escasos, ni que nos deslumbren de tan brillantes. Apenas un equilibrio entre ambos. Se moverá en la ciudad gris, con su traje gris, entre la masa gris, sin llamar mucho la atención.

Hace algunos años, una estadística determinó que una de cada dos personas posee un blog. Fue ahí cuando al hombre promedio se le prendió la lamparita y comenzó a gestar ideas para escribir. Asociado a otro hombre promedio, pensó que una buena idea (nada del otro mundo, si nos guíamos por la media) podría ser que armaran el propio. Hoy lo lograron; tienen un blog similar al promedio y viven sus vidas promedio entre las mismas masas de cemento gris, que los vieron nacer.

Desde este lugar contaran historias, que harán reir a una mitad e insultarlos a la otra. Con fortuna alcanzará el promedio a pasarlo mejor que el resto, para recomendar este espacio...promedio, que aquí se inaugura.

Desde hoy, el hombre promedio no está solo: ahora son dos.